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La estrella de la disparatada saca explica que sus hijos son la prueba de que todo está en orden ahí abajo.
Johnny Knoxville ha recibido más golpes que algunos boxeadores profesionales en su etapa como estrella de Jackass de la MTV, y tiene cicatrices que lo demuestran, algunas de ellas en los lugares más delicados… Como cuando se rompió el pene y tuvo que someterse a una operación.
En una reciente entrevista con Variety mientras promocionaba Jackass Forever, la cuarta entrega de la popular serie de películas donde veremos dando mamporros a la estrella de la UFC Francis Ngannou, Knoxville habló de una de las lesiones más dolorosas que ha sufrido en nombre del entretenimiento, recordando el momento en que, en 2007, se rompió el pene tras intentar dar un loop en moto. "Me rompí el perro del gimnasio hace varios años", dijo. "Eso ha sido bien documentado. Se ha hablado tanto de tan poco... El médico dijo que un par de centímetros hacia abajo y habría estado fuera de servicio".
El incidente dejó a Knoxville con un catéter durante más de tres años, pero se apresuró a asegurar a los lectores que sigue siendo totalmente funcional: "Pero he tenido dos hijos desde entonces, así que está en perfecto estado de funcionamiento", dijo, añadiendo: "Es demasiada información".
Aunque el próximo proyecto de Knoxville será participar en el Royal Rumble de la WWE, no ha descartado la posibilidad de volver para otra película de Jackass si la demanda del público sigue existiendo. "Quiero decir, podría seguir... podríamos hacer otra si quisiéramos", dijo. "No sé si queremos, pero podríamos dejar que los viejos vengan y se diviertan, pero ponerlo más en el reparto joven. No sé. Después [de las dos primeras películas], dijimos: 'Nunca'. Y luego hicimos una tercera y ahora hacemos una cuarta. Así que nunca decimos nunca".
Vía: Men's Health US